26.09.23 En un clima de tranquilidad, producto de un trabajo consensuado constructivo, se celebró la 26ta sesión ordinaria del Concejo Deliberante de la capital, presidido por su titular, Humberto Eduardo Santillán y la presencia de 8 ediles. En la oportunidad, se concretó el emotivo acto de entrega de la Ordenanza por la que “se felicita a la Lic. Cintia Daniela Suárez y Sra. Nunzia Locatelli, por su ardua labor referida a la investigación y divulgación de la vida y legado de María Antonia de Paz y Figueroa (“Mama Antula”).
Entregaron la Ordenanza, el presidente, Humberto Santillán, la concejala Marianella Lezana Hid (LS) y el concejal oficialista, Gustavo Salvatierra Rodríguez.
En efecto, días pasados se sancionó la Ordenanza por la que “se declara de Interés Municipal, Cultural y Social la distinción de “Doctora Honoris Causa”, otorgada a María Antonia de Paz y Figueroa (Mama Antula), por la Universidad Nacional de Santiago del Estero, acaecida el pasado 8 de junio del año en curso y en base a los fundamentos expuestos”.
En los considerandos, se indica que “Cintia Suárez y Nunzia Lucatelli, son periodistas y escritoras, coautoras de la serie de libros sobre la beata María Antonia Paz y Figueroa (Mama Antula), y social cada presentación de los libros escritos sobre la beata”.
Se agrega que “el pasado 8 de junio del corriente año, el Consejo Superior de la Universidad Nacional de Santiago del Estero, otorgó el grado honorifico de Doctora “Honoris Causa” a María Antonia de Paz y Figueroa, conocida como Mama Antula y beatificada por el Papa Francisco en agosto de 2016, convirtiéndose en la primera beata latinoamericana que recibe esa distinción por una universidad pública”.
Se afirma que “el proyecto tuvo su origen en 2018, cuando la santiagueña Licenciada en Periodismo, Cintia Daniela Suárez, fue la solicitante del proyecto allá por 2018. Luego, la iniciativa contó con el apoyo del rector de la Unse, Ing. Héctor Paz y del Ing. Basualdo, decano de la Facultad de Ciencias Exactas y Tecnologías”.
Subraya que “María Antonia de Paz y Figueroa hizo un aporte incalculable desde su lugar a la cultura y dejó una huella, no solo en la sociedad argentina, sino también en una gran cantidad de países, haciendo visible a las minorías de su época”.
Reflexiona además el autor que “para entender lo valioso del rol que cumplió Mama Antula en el siglo XVII, hay que señalar que los jesuitas habían sido expulsados de Latinoamérica y estaba prohibida toda actividad relacionada con su prédica”.
Concluye que “la distinción, además llega en un año particular, en el que se baraja la posibilidad de una pronta visita del Papa Francisco a la Argentina y en el que podría ser declarada la primera santa argentina en los próximos meses”.
