La ministra de Salud, Carla Vizzotti, aseguró que tras la pandemia de coronavirus llega «el momento para redoblar esfuerzos y avanzar en la eliminación del cáncer cervicouterino» en la Argentina y aseguró que el país «es pionero en Latinoamérica en relación a la vacunación y al tamizaje».
«Es un momento para analizar el impacto de la pandemia en el mundo, en las coberturas de vacunación y en la disminución del tamizaje, y redoblar los esfuerzos para avanzar en la eliminación del cáncer cervicouterino», dijo la ministra en el Día de la concientización sobre el Virus del Papiloma Humano (VPH), informó el Ministerio de Salud.
La ministra abogó para que cada día «podamos prevenir más y eliminar diagnósticos tardíos», durante el inicio de un webinario sobre «Avances y desafíos para Argentina en el camino hacia la eliminación global del cáncer cervicouterino» que tuvo como ejes principales la vacunación, el tamizaje y la vigilancia de los genotipos circulantes de VPH.
En agosto de 2020, la Asamblea de la Organización Mundial de la Salud (OMS) aprobó la estrategia global para la eliminación del cáncer cervicouterino, a la que Argentina se adhirió
Esta estrategia plantea que para el año 2030 todos los países puedan lograr una cobertura de vacunación contra el VPH del 90 por ciento, una cobertura de detección temprana de lesiones del 70 por ciento y un acceso del 90 por ciento al tratamiento de las lesiones precancerosas y el cáncer cervicouterino, incluido el acceso a los cuidados paliativos.
A nivel global, se estima que 270.000 mujeres mueren anualmente a causa de cáncer de cuello uterino (CCU) mientras que en el país se registran 4.500 casos nuevos por año.
«Argentina tiene un programa y un abordaje que es innovador, es uno de los países pioneros en Latinoamérica en relación a la vacunación y al tamizaje y cuenta con el laboratorio nacional de referencia de ANLIS-Malbrán como laboratorio regional de la Organización Mundial de la Salud. Hemos generado muchísima evidencia y tenemos mucho camino recorrido”, reconoció Vizzotti.
Y destacó que “Somos el primer país de Latinoamérica en generar evidencia en relación al impacto de la vacunación» por lo que instó a «seguir siendo punta de lanza y continuar produciendo evidencia científica».
Por su parte la investigadora del Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas (INEI) de ANLIS-Malbrán, María Dolores Fellner, explicó el papel que ha tenido este organismo en el transcurso de los años en la prevención integral del cáncer cervicouterino en Argentina, como la vigilancia de los genotipos circulantes de VPH y el apoyo a la vacunación y al tamizaje a través de auditorías
Y adelantó que se realizará un estudio multicéntrico para realizar una evaluación del impacto de la vacunación contra VPH tras 10 años de su implementación.
Natalia Katz, de la Dirección de Control de Enfermedades Inmunoprevenibles (DICEI) hizo hincapié en la posibilidad de coadministración de las vacunas contra COVID-19 y VPH.
En tanto, el coordinador del Programa Nacional de Prevención de Cáncer Cervicouterino (PNPCC) del INC, Luis Paul, dijo que está llevando adelante la investigación sobre conocimientos y prácticas en relación al cáncer cervicouterino en personas con cuello de útero que no se autoperciben mujeres