Luego de un fatal atentado que dejó 137 muertos en Moscú, un tribunal de la capital rusa ordenó el ingreso a prisión preventiva de cuatro sospechosos de haber perpetrado este ataque en una sala de conciertos.
La prisión preventiva fue fijada inicialmente hasta el 22 de mayo y podrá ser extendida hasta que comience el juicio, cuya fecha todavía no se definió.
La policía rusa avanza con la investigación tras el atentado en Moscú
Además de los cuatro sospechosos con prisión preventiva, las fuerzas de seguridad rusas arrestaron a 7 personas más por el atentado en el Crocus City Hall de Moscú.
El tribunal difundió un video en el que se ve a policías llevando a tres de los sospechosos, con esposas en las manos, a la sala de audiencias. El cuarto llegó en una silla de ruedas.
Uno de los sospechosos tenía una venda blanca en la oreja, al igual que en los videos de la detención difundidos el sábado por los investigadores, en los que tres de los presuntos agresores aparecieron con sangre en el rostro.
Según el tribunal, dos de los acusados se declararon culpables. Uno de ellos, originario de Tayikistán, «se declaró enteramente culpable», de acuerdo con la corte.
Las autoridades señalaron anteriormente que los sospechosos eran «ciudadanos extranjeros», pero no detallaron su nacionalidad.
Atentado en Moscú: el ataque de ISIS dejó 137 muertos
El atentado del viernes fue reivindicado por el grupo yihadista Estado Islámico, pero las autoridades rusas apuntan a una pista ucraniana, afirmando que los atacantes trataron de huir a Ucrania, donde supuestamente tenían contactos.
Kiev niega cualquier implicación en este atentado, el más mortífero en Rusia desde principios de la década de 2000.
