«Quiero defenderme de todas las acusaciones que me han realizado en los últimos meses», dijo Bolsonaro, quien señaló que el acto será «pacífico».
Se trata de la primera respuesta que da a la investigación del Supremo Tribunal Federal contra una conspiración surgida en 2022 durante su gestión para intentar dar un golpe de Estado y desconocer la victoria de Luiz Inácio Lula da Silva en los comicios generales de aquel año.
“El último domingo de febrero, día 25, a las 15, estaré en la (Avenida) Paulista en un acto pacífico en defensa de nuestro Estado democrático de Derecho”, afirmó el exmandatario (2019-2022) en un mensaje de video divulgado en sus redes sociales..
El jueves pasado, el juez supremo Alexandre de Moraes le confiscó el pasaporte al expresidente Bolsonaro en el marco de una megacausa en la cual están detenidos dos militares y el exasesor de asuntos internacionales de la Presidencia, el trumpista Filipe Martins.
El magistrado ordenó además de 34 allanamientos en domicilios de ex jefes de las Fuerzas Armadas y exministros de la gestión Bolsonaro.
El expresidente ultraderechista, inhabilitado hasta 2030 por orden de la Justicia por haber puesto en duda falsamente el sistema de votación brasileño antes autoridades extranjeras, pidió que la marcha no sea «contra nadie» pero solicitó que sus seguidores vayan vestidos de verde y amarillo, los colores nacionales.
En el video, dijo que el mundo debe saber la opinión de su sector político, y cerró su mensaje con la frase «Dios, patria, familia y libertad”.
Fake news y actividades ilegales
Entre sus familiares está siendo investigado su hijo Carlos, concejal de Río de Janeiro, por comandar un núcleo ilegal de divulgación de ‘fake news’ desde la presidencia entre 2019 y 2022.
El jueves pasado fue detenido -y liberado dos días después- el presidente del bolsonarista Partido Liberal, Valdemar Costa Neto, en cuyo domicilio allanado se le encontró una pistola sin la autorización para portarla y pepitas de oro supuestamente contrabandeadas de la minería ilegal.
El caso está vinculado al intento de golpe de Estado del 8 de enero de 2023 que seguidores de Bolsonaro perpetraron contra Lula.
Según divulgó el Supremo Tribunal Federal, Bolsonaro encabezó reuniones de gabinete -cuya grabación es pública- ordenando a sus ministros alinearse para divulgar ‘fake news’ sobre el sistema electoral.
En el expediente del proceso figura que Bolsonaro apoyó la redacción de un borrador que preparaba un autogolpe de Estado antes de dejar el poder el 31 de diciembre de 2022, que incluía detener al juez de Moraes e intervenir la justicia electoral, anulando la victoria de Lula.
Lula venció a Bolsonaro por 50,9% contra 49,1% en balotaje, un resultado que todo el arco político avaló menos el expresidente.
En el video en el cual convoca a la manifestación del 25 de febrero, Bolsonaro aparece vestido con una camiseta de la selección nacional de fútbol.