El presidente Alberto Fernández visitó este sábado, en Luján, al padre José María «Pepe» Di Paola, con el fin de sumar su adhesión al proyecto «Ni un pibe ni una piba menos por la droga», que impulsa la Federación de Hogares de Cristo y que fue presentado este fin de semana en esa ciudad bonaerense.
En tiempos donde parecieran reinar la violencia y el narcotráfico, sobre todo luego de los episodios ocurridos recientemente en Rosario, la iniciativa busca unir las fuerzas de los representantes políticos y espirituales para hacer frente a una problemática que nos ocupa a todos: las adicciones en los más jóvenes.
La reunión entre el jefe de Estado y el padre Pepe está ligada a las actividades pensadas para celebrar los 15 años de los Hogares de Cristo, centros de recuperación de adictos creados en Buenos Aires por el entonces cardenal Jorge Bergoglio. De hecho, también fue impulsada para sumarse a la alegría por los 10 años del pontificado de Francisco, que se cumplen este próximo lunes 13 de marzo.
Cabe destacar que, durante la semana, la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner también firmó el compromiso que busca bajar los niveles de confrontación política y congregar a todos los referentes de los distintos bloques en un mismo sentir contra la droga. Sin ir más lejos, el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, también fue invitado al Cabildo de Luján, en muestra de que esta medida no se alinea a ningún partido político, sino que está en consonancia con el bienestar de toda la sociedad.
«Invitamos a todos los dirigentes argentinos que fueron elegidos por el voto popular, incluidos sus ministros», detalló el padre Pepe previo al evento, siendo él quien dirige La Familia Grande de los Hogares de Cristo, compuesto por más de 200 centros barriales enfocados en rescatar y acompañar a los adolescentes y jóvenes que afrontan serias adicciones.